Una de las cosas que digo cuando vamos a realizar una sesión preboda es que lo den todo y vayan con actitud a la sesión. Esperanza y José cumplieron a raja tabla con ello e incluso superó mis expectativas.

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Quedamos justo al amanecer en el parque regional de Calblanque, una playa preciosa protegida donde he ido varias veces y nunca me cansaré de ir. Recorrimos la playa desde una punta a otra y disfrutamos de un amanecer espectacular. 

Esperanza y José es de esas parejas que desprenden delicadeza y ternura por todos lados. No pararon de sonreír, acariciarse y besarse.  ¡Una pareja que me ha enamorado!